En realidad no hay nada por lo que valga la pena preocuparse. En realidad no hay nada por lo que valga la pena enojarse, dolerse o amargarse. Definitivamente no hay nada por lo que valga la pena perder la paz mental. Estas importantes verdades se derivan naturalmente del hecho siguiente: Vas a vivir para siempre - en alguna parte. Esto quiere decir que hay tiempo de sobra para corregir las cosas si es que han salido mal. No importa cuál podrá haber sido tu error, la oración suficiente lo superará y cancelará. Si tus seres amados parecen comportarse tontamente y, mientras tanto, sufren en el proceso, esto quiere decir que la naturaleza bondadosa les está enseñando una lección que necesitan aprender.
Pero supongamos que ¡algo terrible pasara! Bueno, y entonces ¿qué? Supongamos que pierdes todo lo que tienes y quedas en la calle. Entonces, ¿qué? Piensa en la maravillosa demostración que podrías hacer para salir de dicha situación, y probablemente derivarías varias lecciones valiosas de ello. Y, sea como fuere, todo resultaría muy interesante. Entonces, ¿qué? Cuando se sedimente el polvo, Dios todavía estará operando y tú estarás vivo en alguna parte, listo para continuar.
Emmet Fox
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